En el año 2009, el equipo de Casa Xitla introdujo una batería de filtros de agua en la cocina de Casa Luna. Son de varias compañías y tienen una duración aproximada de seis meses hasta que los tenemos que cambiar por nuevas. El filtro de agua está conectado con la red de agua y transforma esa agua en agua limpia que podemos ocupar para beber y para cocinar para nuestros huéspedes. El filtro limpia el agua a fondo y no necesita algún otro tratamiento aparte de ese. El proceso de filtración pasa por tres unidades. La primera unidad es un filtro mecánico para atrapar partículas sólidas que a veces van en el agua. Eso es un proceso físico que trabaja con ayuda de fibra de vidrio. Las otras dos unidades son filtros de cerámica de microporo que oxigenan y limpian impurezas. Esos filtros eliminan partículas microscópicas. El último filtro también tiene cloruro de plata que es un bactericida. Gracias al filtro no tenemos que comprar agua embotellada o garrafones. Así ahorramos dinero y logramos reducir nuestro uso de envases de plástico en un mínimo.